La pintura, para solidificar y adherir a las superficies, debe ser polimerizada en el horno a una temperatura estable durante un tiempo adecuado. Para obtener los mejores resultados, la temperatura en el interior del horno debe ser uniforme y la recirculación de aire constante.
Este horno de calentamiento indirecto está diseñado con la cámara de combustión situada debajo de la cámara de paso de piezas. La forma de campana permite que el aire caliente permanezca en el interior de forma natural. Adecuado cuando las piezas que cuelgan del transportador son de tal volumen que permiten subidas y bajadas en el recorrido del transportador aéreo.
Las cortinas de aire, debidamente dimensionadas según la velocidad y el tamaño del paso, forman una pared de aire forzado con el objetivo de mantener el calor en el interior y evitar el derroche de energía térmica. Nos aseguramos de que no se produzca una contaminación de color entre diferentes lotes separando adecuadamente la entrada y la salida del horno.
Los hornos de circulación de aire forzado constan de dos áreas separadas: la cámara de trabajo donde se alojan las piezas y un generador de calor de intercambio indirecto.
El material se introduce en el interior mediante carros o integrando la estructura del horno con un sistema de dos vías y balancines aéreos.
Las puertas de servicio pueden ser batientes o con apertura corredera.